Hola Chicos! Reciban un afectuoso saludo en nombre de Susana, Mónica y Paola.

Queremos comentarles que, con este taller, pretendemos habilitar un espacio para la pregunta, para la duda, para la opinión, para la expresión, reflexión y el conocimiento de diversos aspectos vinculados a la sexualidad. Junto a ustedes trataremos identificar algunos prejuicios y falsas creencias para construir “desde el derecho” nuevas formas de pensar la sexualidad.

Esperamos que les guste nuestra propuesta y encontrarnos en el taller, ¡Hasta entonces!


COORDINADORAS: Bisi, Mónica; Fullani, Paola
Zuain, Susana

lunes, 12 de septiembre de 2011

ALGUNOS CONCEPTOS CLAVES


Sexualidad

“La sexualidad es una construcción social simbólica, hecha a partir de una realidad propia de las personas: seres sexuados en una sociedad determinada.
Como tal, es una dimensión constitutiva del ser humano: biológica, psicológica, cultural, histórica y ética, que comprende sus aspectos emocionales,  comportamentales, cognitivos y comunicativos, tanto para su desarrollo en el plano individual como en el social”.

                                                 Rubio, Eusebio.



Conceptos relacionados con la sexualidad
 ( Tomado de OPS/OMS)

Género

El género es la suma de valores, actitudes, papeles prácticas o características

culturales basadas en el sexo. El género, tal como ha existido de manera

histórica, transculturalmente, y en las sociedades contemporáneas, refleja y

perpetúa las relaciones particulares de poder entre el hombre y la mujer.

Identidad de género
La identidad de género define el grado en que cada persona se identifica como

masculina o femenina o alguna combinación de ambos. Es el marco de referencia

interno, construido a través del tiempo, que permite a los individuos

organizar un autoconcepto y comportarse socialmente en relación a la percepción

de su propio sexo y género. La identidad de género determina la forma en

que las personas experimentan su género y contribuye al sentido de identidad,

singularidad y pertenencia.


Orientación sexual
La orientación sexual es la organización específica del erotismo y/o del vínculo

emocional de un individuo en relación al género de la pareja involucrada

en la actividad sexual. La orientación sexual puede manifestarse en forma de

comportamientos, pensamientos, fantasías o deseos sexuales, o en una combinación

de estos elementos.

Identidad sexual
La identidad de género define el grado en que cada persona se identifica como

hombre o mujer o como una combinación de ambos, y la orientación sexual

de la persona. Es el marco de referencia interno que se forma con el correr de

los años, que permite a un individuo formular un concepto de sí mismo sobre

la base de su sexo, género y orientación sexual y desenvolverse socialmente

conforme a la percepción que tiene de sus capacidades sexuales.

Erotismo
El erotismo es la capacidad humana de experimentar las respuestas subjetivas

que evocan los fenómenos físicos percibidos como deseo sexual, excitación

sexual y orgasmo, y que por lo general se identifican con placer sexual.

El erotismo se construye tanto a nivel individual como social con significados

simbólicos y concretos que lo vinculan a otros aspectos del ser humano.

Vínculo afectivo
La vinculación afectiva es la capacidad humana de establecer lazos con otros

seres humanos que se construyen y mantienen mediante las emociones. El

vínculo afectivo se establece tanto en el plano personal como en el de la sociedad

mediante significados simbólicos y concretos que lo ligan a otros aspectos

del ser humano. El amor representa una clase particularmente deseable de

vínculo afectivo.

Actividad sexual
La actividad sexual es una expresión conductual de la sexualidad personal

donde el componente erótico de la sexualidad es el más evidente. La actividad

sexual se caracteriza por los comportamientos que buscan el erotismo y es

sinónimo de comportamiento sexual.

Prácticas sexuales
Las prácticas sexuales son patrones de actividad sexual presentados por individuos

o comunidades con suficiente consistencia como para ser predecibles.

Relaciones sexuales sin riesgo
La expresión “relaciones seguras sin riesgo” se emplea para especificar las

prácticas y comportamientos sexuales que reducen el riesgo de contraer y

transmitir infecciones de transmisión sexual, en particular el VIH.

Comportamientos sexuales responsables
El comportamiento sexual responsable se expresa en los planos personal,

interpersonal y comunitario. Se caracteriza por autonomía, madurez, honestidad,

respeto, consentimiento, protección, búsqueda de placer y bienestar. La persona que practica

un comportamiento sexual responsable no pretende causar daño y se abstiene de

la explotación, acoso, manipulación y discriminación. Una comunidad fomenta

los comportamientos sexuales responsables al proporcionar la

información, recursos y derechos que las personas necesitan para

participar en dichas práctica.

No hay comentarios:

Publicar un comentario